Mucho que decir y poco que celebrar

Guillermo Robles Ramírez
Por Guillermo Robles Ramírez

El día de hoy se conmemora el Día de la Libertad de Expresión en México, aunque es más conocido como el Día de la Libertad de Prensa establecido así por el expresidente Miguel Alemán Valdés, el 7 de junio de 1951, como una manera de honrar la valentía de aquellos periodistas quienes fueron la voz del pueblo, durante la década de la censura de la libertad de expresión.

Aunque fue en el tiempo de Benito Juárez cuando legisló la libre expresión para los mexicanos estando en la Carta Magna en los artículos sexto y séptimo, aun así, el gobierno reprimía aquellos que se manifestarán; siendo así la labor de los valientes reporteros quienes pasaron a ser el porta voz de los mexicanos.

Los medios de comunicación tuvieron en un tiempo tanta importancia y peso en el país que con el pasar de los años la prensa, también fue conocido como el “Cuarto Poder”.

Gloriosos aquellos años, en donde todo aquel que trabajara como reportero, columnista, editorial, al igual que en radio y televisión eran considerados como gente intocable contra los abusos de las autoridades, ejerciendo un verdadero poder de respeto a la libertad de expresión y los derechos civiles.

¿Qué tanto peso tendría en aquel entonces?, para considerarse el Cuarto Poder después de los poderes constitucionales siendo el primero el Poder Ejecutivo, el segundo el Poder Legislativo y el tercero el Poder Judicial.

El cuarto poder, fue elevado a ese grado por el mismo pueblo, ya que de manera oficial no existe en un marco constitucional puesto que no figura dentro de la Carta Magna, sin embargo, se ganó el respeto con los años pasando a ser la careta de la “libre expresión en México”.

Al día de hoy tanto la libre expresión, así como la libertad de prensa, solo son recordados en los libros de historia y en las pocas hemerotecas que quedan en el país.

Al día de hoy la libre expresión de prensa pasa en su peor decadencia en el país, en donde tanto funcionarios, alcaldes, gobernadores y presidentes de la república presumen respetar la libre expresión de los comunicadores; pero son los primeros en aplicar la “ley mordaza”.

Una ley mordaza a la que está fuera de todo marco jurídico, y no solo con amenazas o artimañas legales para agredir a todo aquel quien se atreva del gremio periodístico señalar algo negativo que no les agrade para dejar caer la “ley mordaza”, con una simple llamada a los dueños de periódicos, radio o medios electrónicos de callar o retractarse de lo “dicho”, porque de lo contrario retirarán todo tipo de convenio publicitario gubernamental.

Bajo este tipo de amenazas en donde lamentablemente es una realidad que todo medio de comunicación se sostiene económicamente de los ingresos gubernamentales ya sea Presidencias Municipales, Estatales, Federales o bien ingresos de uno de ellos, dos o las tres.

Una realidad triste en donde es imposiblemente sostener una plataforma administrativa de cualquier medio de comunicación, porque pretender sostener un negocio de noticias sin importar su rubro, es decir, prensa escrita, radio, televisión y medios electrónicos con solamente el ingreso del comercio o bien la Iniciativa Privada es simplemente inoperable.

De la misma manera funcionan algunas dependencias de gobierno, y por solo mencionar algunas está el Seguro Social y Secretaria de Hacienda y Crédito Público en donde pobre aquel que se atreva hablar mal de ellos, porque en seguida mandan a sus empleados para hacer una revisión al medio de comunicación como medida de represión y callar la libre expresión.

Es así como se va formando la línea editorial de cada medio de comunicación en el país, en donde los intereses de las empresas noticiosas no pueden estar por encima del daño económico que pueden causar sus “clientes”, bajo la amenaza de no pagar o romper lazos comerciales con el gobierno.

Al final del día los medios de comunicación son como cualquier negocio en donde tienen trabajadores que pagar, impuestos igual que todos, gastos básicos directos e insumos.

Hay pocos comunicadores que logran ejercer su profesión con toda libertad, pero al poco tiempo son coartados con los gastos de la vida, sin poder sostener su pequeño patrimonio y sin poder sobrevivir contra aquellos tiranos que atacan contra el estómago.

Pero no son el único enemigo que tienen quienes ejercen el periodismo ya que, si no es el gobierno, es el mismo crimen organizado los encargados en no solo matar o torturar a quienes se nieguen a una petición de ellos, sino también han formado parte de la larga lista de desaparecidos en donde todo indica que en México el periodismo carece de una total libertad. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org

Deja tu comentario